Una revisión de la investigación
La mala calidad del sueño puede tener efectos negativos e incluso catastróficos en el rendimiento y la salud. Como afirma el Dr. Mercola: «El sueño es fundamental para la salud, especialmente para la salud cerebral y cognitiva. El cerebro necesita dormir para mantener el equilibrio metabólico y eliminar los desechos tóxicos acumulados a través del sistema glinfático. La mala memoria y la falta de concentración, el aumento del estrés, el aumento de peso y el debilitamiento del sistema inmunitario son solo algunos de los posibles efectos de la falta de sueño».
Los campos electromagnéticos pulsados pueden ser una ayuda eficaz para dormir y han demostrado ser beneficiosos en varios trastornos del sueño, como el insomnio 1, la narcolepsia 2, la nicturia 3, etc. Lea esta revisión de investigación para saber cómo funciona la terapia con campos electromagnéticos pulsados (PEMF) para mejorar el sueño y revise la evidencia de su aplicación en los trastornos del sueño.
Para gozar de buena salud y funcionar de manera óptima durante el día, los adultos necesitan entre 7 y 8 horas de sueño cada noche.
Si bien los procesos fisiológicos que no podemos controlar pueden ser la causa de los trastornos del sueño, los factores de estrés emocionales y ambientales, como la radiación electromagnética y la contaminación atmosférica, también pueden afectar la calidad de nuestro sueño. Los trastornos del sueño pueden afectar incluso a quienes siguen las prácticas recomendadas de higiene del sueño, como apagar las luces y los teléfonos antes de acostarse.
El insomnio afecta actualmente a una parte considerable de la población mundial, casi el 20%. Se ha observado que las personas con síndrome de hipersensibilidad eléctrica, dolor crónico y depresión también presentan problemas para dormir. Si estos problemas se ignoran, la persona puede llegar a un punto crítico debido a la acumulación de la falta de sueño a lo largo del tiempo.
¿Cómo actúa la terapia PEMF como ayuda para dormir?
Se ha demostrado que la terapia PEMF mejora la regeneración de las células neuronales⁵, modula los neurotransmisores (melatonina y serotonina) y puede sincronizar las ondas cerebrales para mejorar los patrones de sueño. Por lo tanto, la terapia PEMF tiene el potencial de aliviar síntomas de trastornos del sueño como la dificultad para conciliar el sueño o un sueño corto o inquieto.
El sueño se divide en dos fases principales : REM (movimientos oculares rápidos) y NREM (sin movimientos oculares rápidos). La fase NREM representa aproximadamente el 80 % de nuestro tiempo de sueño y, en su fase inicial, es la más profunda y difícil de interrumpir, ocurriendo al principio de la noche. Durante esta fase, la actividad cerebral alcanza su nivel más bajo, entre 1 y 4 Hz.
Un sistema PEMF de baja frecuencia como el OSKA Pulse puede utilizarse antes de acostarse o al intentar conciliar el sueño. Con una aplicación suficiente de PEMF, la actividad cerebral puede acercarse a patrones más saludables.
La terapia PEMF también mejora la regeneración celular, incluyendo la de las células neuronales, y puede favorecer la liberación de melatonina, lo que resulta en una mejor salud cerebral y una mejora natural en la calidad del sueño. El sueño óptimo se produce cuando se liberan grandes cantidades de la hormona melatonina, lo cual suele ocurrir de forma automática en la oscuridad gracias a la glándula pineal. Los estudios sobre los efectos de la terapia PEMF en la producción de melatonina han mostrado resultados positivos.
Los niveles de melatonina disminuyen con la edad, y la probabilidad de tener niveles bajos de melatonina aumenta con la edad. Como resultado, disminuye la capacidad para dormir y la frecuencia de los trastornos del sueño aumenta gradualmente. Los patrones de sueño relacionados con las ondas cerebrales comienzan a cambiar durante la mediana edad, lo que provoca una disminución drástica del sueño NREM; en cambio, la cantidad de sueño REM se reduce solo ligeramente. Por lo tanto, la disminución de la secreción de melatonina podría estar relacionada con el desarrollo del insomnio.
Un estudio polaco sobre los efectos del uso regular de PEMF en la producción de serotonina muestra que PEMF también puede aumentar los niveles de serotonina.
Estudios clínicos sobre la terapia PEMF para trastornos del sueño:
En un ensayo clínico comparativo sobre la estimulación magnética transcraneal repetitiva (EMTr) para el insomnio primario crónico, en comparación con tratamientos farmacológicos y psicoterapéuticos, se observó que la terapia con campos magnéticos pulsados (CEMP) ofrece mejores resultados que ambas intervenciones. Mejora significativamente la arquitectura del sueño, aumenta el sueño profundo y proporciona un mejor efecto a largo plazo.
En un ensayo clínico aleatorizado diseñado para evaluar el efecto de la terapia con campos electromagnéticos pulsados (CEMP) en el tratamiento de pacientes con radiculopatía lumbar discogénica, la puntuación del sueño mejoró en un [p < 0,001] para los usuarios de CEMP. La mayoría de los autores consideran estadísticamente significativo un valor de p < 0,05 y altamente significativo un valor de p < 0,001 (menos de una probabilidad entre mil de error).
En este reciente estudio clínico con 153 pacientes, se demostró que un sistema de terapia magnética pulsada es seguro y eficaz para el tratamiento del insomnio. El grupo de usuarios del sistema de terapia magnética pulsada experimentó una mejoría continua a lo largo de las 4 semanas del estudio. Los efectos del tratamiento persistieron en el estudio de seguimiento realizado una semana después. Casi el 70 % de los participantes ya no presentaban síntomas de insomnio clínicamente significativos.
¿Es seguro el uso de PEMF?
Aunque no se han reportado efectos secundarios negativos, es importante seguir las instrucciones del fabricante.
Conclusiones:
Es lamentable que la mayoría de las personas con insomnio y otros trastornos del sueño recurran a medicamentos que pueden tener efectos secundarios de gran alcance, especialmente con el uso prolongado. En conclusión, la terapia con campos electromagnéticos pulsados presenta evidencia alentadora que demuestra su eficacia para tratar los trastornos del sueño y mejorar la calidad de vida de quienes la utilizan.


